El reto de la descarbonización del parque inmobiliario de la Unión Europea para 2050 requiere una renovación a gran escala que tiene muchas implicaciones a nivel social, económico, político y tecnológico.
Actualmente, la tasa de renovación energética anual ponderada es verdaderamente baja, en torno a un 1%. A este ritmo, la descarbonización en el sector de la construcción tardaría siglos en llevarse a cabo. Por lo tanto, uno de los objetivos de la Directiva (EU) 2024/1275 es apoyar la renovación de edificios incluida la transición hacia instalaciones de calefacción, refrigeración, ventilación y ACS sin emisiones.
Existen diferentes opciones para cubrir las necesidades energéticas de un edificio de cero emisiones: mediante energía generada in situ o en las proximidades procedente de fuentes renovables. Algunas de las tecnologías bajas en carbono (B0C) son:
La clave del éxito para conseguir edificios de cero emisiones consiste en diseñar una envolvente térmica que permita reducir al máximo la demanda de energía y utilizar fuentes de energía renovables para cubrir las necesidades energéticas del edificio.
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