Qué son los Certificados de Ahorro Energético (CAEs), ventajas y marco regulatorio

Un nuevo impulso llega al ámbito de la eficiencia energética en España. Se trata de un mecanismo basado en un “Mercado de Valores” regulado donde se pueden comprar y vender ahorros energéticos obtenidos tras una actuación de eficiencia energética en los diferentes sectores económicos como el residencial, terciario, industrial, transporte, agricultura, etc., sin importar su tamaño. Estos ahorros energéticos se materializan en títulos nominativos llamados Certificados de Ahorro Energético (CAEs) o Certificados Blancos, que emite el Organismo Nacional de Acreditación. Los principales agentes que intervienen en el Mercado de ahorros energéticos son tres:

• El beneficiario del ahorro (vendedor): Toda persona física o jurídica que genera un ahorro energético obtenido tras la aplicación de medidas de eficiencia energética (por ejemplo, una comunidad de propietarios). 
• El verificador: Organismo acreditado que verifica los ahorros obtenidos por el beneficiario. Es decir, es el organismo que transforma una actuación de eficiencia energética en un CAEs.
• El sujeto obligado y/o delegado (comprador): Toda persona física o jurídica que tenga obligaciones de eficiencia energética establecidas por la normativa vigente (por ejemplo, una empresa comercializadora de energía). 

Eventualmente, existirá la figura del intermediario que ponga en contacto a los compradores con vendedores de los ahorros energéticos. El precio de los CAEs es libre, en el mercado primario, mientras que, en el secundario, tiene un precio máximo de 167 €/MWh, para este año y se prevé que en 2024 llegue a 200 €/MWh. La Figura 1 muestra el funcionamiento del mercado de los CAEs con los agentes intervinientes.

Figura 1: Esquema del mercado de los CAEs. El verificador analiza la documentación técnica proporcionada por el generador de los ahorros energéticos y, una vez verificado, emite el CAE que permite monetizar el ahorro energético mediante una transacción de compra-venta

Este modelo económico, basado en ahorros energéticos, contribuye muy positivamente al aumento de la eficiencia energética, al mejorar la forma de cuantificar los consumos de energía y gracias a la asignación de un precio a esos ahorros que será utilizado para liquidar las obligaciones legales. Algunas de las ventajas más destacadas de los CAEs son:

• Fomentan la inversión en medidas de eficiencia energética, lo que se traduce en una reducción del consumo energético y, por tanto, una disminución de la factura energética.
• Permiten la obtención de ingresos adicionales por la venta de los Certificados de Ahorro Energético generados.
• Son una herramienta eficaz para cumplir con las obligaciones de eficiencia energética establecidas por la normativa vigente.
• Contribuyen a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y, por tanto, al cumplimiento de los objetivos de reducción de emisiones establecidos por los acuerdos internacionales.
• Favorecen el desarrollo de un mercado de eficiencia energética que puede impulsar la creación de empleo y el crecimiento económico en el sector de la eficiencia energética.
• Son compatibles con cualquier subvención, como los Fondos Next Generation, salvo las ayudas que provengan del Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE).  

Por último, el Real Decreto 36/2023, de 24 de enero, por el que se establece un sistema de Certificados de Ahorro Energético, es el documento que pone en marcha este sistema que tanto éxito está cosechando en otros países de la UE, como Francia, donde lleva ya funcionando varios años. Por su parte, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico está haciendo una importante labor de difusión de los CAEs, mediante noticias y conferencias, lo que ha sido muy bien recibido entre los agentes del sector de la eficiencia energética. Ya no hay excusas, tanto las personas físicas como jurídicas tienen la oportunidad de aportar su grano de arena e invertir para optimizar el consumo de la energía. Para ello, los CAEs son la clave para lograrlo.

Marco regulatorio de referencia:

– Directiva 2012/27/UE, del Parlamento Europeo y de Consejo, de 25 de octubre de 2012, relativa a la eficiencia energética, modificada mediante Directiva (UE) 2018/2002 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 11 de diciembre de 2018 (en adelante, Directiva de eficiencia energética). 

– Ley 18/2014, de 15 de octubre, de aprobación de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia. 

– Real Decreto-ley 23/2020, de 23 de junio, por el que se aprueban medidas en materia de energía y en otros ámbitos para la reactivación económica. 

– Real Decreto 36/2023, de 24 de enero, por el que se establece un Sistema de Certificados de Ahorro Energético.

– Orden TED/815/2023, de 18 de julio, por la que se desarrolla parcialmente el Real Decreto 36/2023, de 24 de enero, por el que se establece un Sistema de Certificados de Ahorro Energético.

– Orden TED/845/2023, de 18 de julio, por la que se aprueba el catálogo de medidas estandarizadas de eficiencia energética.