Los conceptos de sostenibilidad y la salud del usuario están directamente relacionados en el mundo de la arquitectura y la construcción. Los materiales sostenibles no solo contribuyen a la preservación del medio ambiente, sino que también crean entornos más saludables y seguros para los ocupantes. Dicho esto, es importante destacar que las personas pasan hasta un 90% de su tiempo en espacios interiores, y estos espacios pueden tener un impacto positivo o negativo en el cerebro, las emociones y las capacidades cognitivas de las personas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Las ciudades y los edificios tienen el potencial de generar este bienestar en los usuarios, y, a través de su diseño, se pueden incentivar comportamientos, estados emocionales y pensamientos desde un enfoque positivo, mejorar la salud mental y reducir el estrés. Todo esto comprende un enfoque holístico que engloba tanto el impacto ambiental como el bienestar humano.
Los materiales saludables son aquellos que no emiten sustancias nocivas durante su ciclo de vida y tienen un impacto mínimo en el medio ambiente. Estos materiales reducen la exposición a contaminantes tóxicos que afectan la calidad del aire interior y causan problemas de salud como asma, alergias y trastornos del desarrollo neurológico, lo cual puede ocurrir desde una edad temprana en las personas. Es por esto por lo que la selección de materiales como pinturas libres de compuestos orgánicos volátiles (COV), madera sin tratamientos químicos agresivos y aislamiento natural, puede ayudar a crear un espacio más sano para el usuario. Algunos ejemplos de materiales saludables son:
Por otro lado, algunos materiales con sustancias químicas nocivas para la salud a evitar a la hora de construir son:
Crear espacios con este tipo de materiales saludables promueve un desarrollo saludable y una mejor calidad de vida, lo cual va muy acorde con Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) planteados Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), promoviendo la salud y el bienestar al reducir la exposición a sustancias tóxicas (ODS 3), desarrollando comunidades resilientes (ODS 11), promoviendo el consumo y la producción responsables (ODS 12) y ayudando a mitigar el cambio climático (ODS 13).
Queda claro que la salud es una prioridad que como sociedad no podemos desatender, tenemos la oportunidad de encaminar la arquitectura y la planificación urbana desde una nueva perspectiva para garantizar que nuestros edificios y ciudades sean verdaderamente saludables.